Una salomónica solución encontraron el alcalde suplente Waldo Sankán y las directivas de las asociaciones de funcionarios de la municipalidad de Arica, Afuma 1 y Afuma 2, al acordar crear un turno de emergencia para realizar la recolección de basura domiciliaria este domingo 30 de septiembre, en reemplazo del lunes 1 de octubre que se llevará a cabo un Paro Nacional convocado por Asemuch (Asociación de Empleados Municipales de Chile).
De esta manera, debido a la preocupación del jefe comunal y de los dirigentes, se reducirá el impacto ambiental que podría provocar el no retiro de la basura el día lunes próximo, debido al paro de “brazos caídos” de los trabajadores ediles que reclaman contra el artículo 121 que modifica las facultades municipales.
Por tal motivo, mañana domingo, en todo el perímetro de las poblaciones ubicadas en el sector sur del río San José, los camiones recolectores comenzarán a trabajar a las 6 de la mañana hasta las 14:00 horas, el primer turno; mientras que la segunda jornada será entre las 15:00 y las 23:00 horas.
EMERGENCIA
Fernando Vargas, subdirector de Aseo y Ornato, señaló que “es un caso especial, de urgencia, porque se está peleando por una reivindicación de los municipales. Se está haciendo un esfuerzo con la salida dominical para atenuar este tema que es bastante complicado para toda autoridad comunal”.
El directivo edil pidió la comprensión y la colaboración de la comunidad, especialmente del sector céntrico y locales comerciales, para que saque la basura este domingo apenas escuchen el paso de los camiones recolectores.
La normalidad retornará el lunes, a las 22:30 horas, ya que igualmente, en acuerdo con el jefe comunal, se adelantará la salida de los camiones programados para el martes, día que también se reforzará el servicio con camiones de repaso, para dejar la ciudad limpia una vez restablecida las labores en los municipios del país.
Cabe indicar que para los trabajadores ediles en protesta, el texto de la iniciativa 121, que hoy se encuentra en la Comisión de Gobierno Interior del Senado, no cumple ninguno de los criterios señalados por Asemuch y, por el contrario, es una mala ley, que de aprobarse afectará gravemente la estabilidad de los trabajadores municipales y bajará la calidad de los servicios.
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